Cómo colocar suelo laminado: Pasos y consejos

Desde suelos laminados hasta los nuevos sistemas de clic o las tarimas multicapa. ¿Qué tipo de tarima flotante has decidido instalar en tu hogar? Sea cual sea tu opción, tienes que saber que estos suelos son una de las alternativas más resistentes, económicas y con mejor acabado del mercado.

A diferencia del parquet tradicional, los suelos laminados son mucho más sencillos de poner y no requieren grandes obras. Con un poco de paciencia y tiempo tú mismo serás capaz de montar la tarima flotante de tu hogar como un auténtico profesional. ¿Te atreves a instalar tu nuevo suelo laminado? Si tu respuesta es sí, sigue leyendo junto al equipo de Tarimas Diamond y te explicaremos paso a paso todo lo que necesitas saber para ahorrar dinero en la colocación de tus láminas.

Consejos para instalar y poner suelo laminado en tu hogar

Si has decidido ponerte manos a la obra, lo primero que tienes que hacer es preparar al máximo el suelo actual de tu hogar para la colocación e instalación de la nueva tarima flotante.

Preparación y liberación de las estancias: si la instalación del suelo laminado se realiza en una casa amueblada es necesario que retires todos el mobiliario que forme parte de la estancia. Además, deberás quitar las puertas y los rodapiés antiguos.
Ambiente del hogar: antes de comenzar a colocar la tarima flotante asegúrate que no hay ningún tipo de humedad y que dichas estancias no superarán los 35ºC durante el momento de la instalación. Las condiciones ambientales son fundamentales para que puedas conseguir un resultado perfecto en tu suelo.
Limpieza y nivel del suelo: el suelo laminado se puede colocar directamente sobre cualquier superficie. Sin embargo, es importante corroborar que la zona se encuentra totalmente limpia, sólida y nivelada. No debes olvidar que cualquier tipo de irregularidad puede afectar a las capas que vayamos a instalar encima. Y, por supuesto, evita siempre utilizar productos abrasivos que puedan dañar el suelo laminado durante su limpieza.
Materiales necesarios para la instalación: recuerda tener a mano todos los elementos que vayas a necesitar el día de la colocación del suelo laminado. Puedes dejarlos preparados en una estancia de tu hogar para que se aclimaten a la temperatura de esta zona. Las tablas suelen ser bastante finas, por lo que tendrán un grosor de entre los 7 y los 12 mm. Habitualmente, suelen incorporar una lámina de aislamiento que te ayudará a asentarlo en la tabla.

Materiales básicos para montar tarima flotante

Para que no te pille por sorpresa y tengas que dedicar más tiempo a tu instalación, en Tarimas Diamond te indicamos los materiales básicos que utilizarás durante el proceso de montar tu suelo laminado.

Suelo laminado: escoge el tipo de tarima que mejor se adapte a tus necesidades y el estilo de tu hogar. Antes de ir a comprarlo, mide la superficie de la estancia que quieres cubrir y añade un 10% más de material para que no te quedes corto y tengas algún tipo de inconveniente.
Rodapié: como te hemos indicado anteriormente, será necesario que cambies por completo el rodapié de tu hogar. Mide el perímetro de tu habitación e intenté añadir algún que otro metro de más para prevenir.
Material de aislamiento: es uno de los materiales imprescindibles durante tu proceso de instalación del suelo laminado. Se coloca siempre debajo para conseguir aislar, amortiguar y reducir el sonido de los posibles golpes e impactos. Además, si vas a colocar la tarima directamente sobre cemento, tu subsuelo tendrá que ser impermeable.
Sierra de corte
Cinta americana
Lápiz
Adhesivo para el rodapié
Metro o cinta métrica

Paso por paso: cómo colocar suelo laminado

Ahora que ya tenemos todo preparado te preguntarás cómo empezar a colocar el suelo laminado, ¿verdad? Pues bien, toma nota porque te indicamos los pasos que debes seguir para la instalación.

#1 Coloca el aislante

Como te hemos comentado anteriormente, es necesario colocar aislante antes de superponer las capas y las láminas. La función principal de este material es aislar de la humedad el subsuelo, conseguir una mayor uniformidad y amortiguar el sonido de los golpes y las caídas de objetos.

#2 Planifica tanto el diseño del suelo como la orientación

Una de las incógnitas más importantes que debes resolver es en qué dirección colocar el suelo laminado. Para ello, lo ideal es que te fijes en la pared más larga y recta de tu estancia para escoger el diseño más afín a tus gustos y las demás estancias de tu hogar. La planificación te ayudará a reducir al mínimo el número de cortes. Puedes utilizar abrazaderas para conseguir un acabado más recto.

#3 Juntas de dilatación

Los cambios de humedad y temperatura en las estancias provocan que los suelos laminados puedan llegar a contraerse y expandirse con el tiempo. Te recomendamos que dejes siempre unos cuantos milímetros de separación entre la pared y las propias láminas.

#4 Es hora de colocar las primera láminas

Existen diferentes sistemas de colocación del suelo laminado, el de clic o enganchado suele ser los más frecuentes. Aunque también puedes realizarlo a mano con ayuda de herramientas más concretas para instalar tarimas flotantes y un martillo.

#5 Sigue con las filas siguientes

Poco a poco, irás cubriendo el suelo de tus láminas. Para conseguir un mejor resultado intenta que entre una lámina y otra haya una distancia aproximada de unos 15 cm.

#6 Instala la última lámina

Al estar pegada a la pared, esta última lámina suele ser la más complicada de colocar. Probablemente tengas que maniobrar y hacer uso de ciertas herramientas específicas.

#7 Ajusta y remata la zona que se encuentra alrededor de las puertas

Intenta ajustar lo máximo posible tus láminas al contorno de las puertas y las tapajuntas. Solo así conseguirás tener un resultado perfecto y un acabado profesional.

#8 Coloca de nuevo el rodapiés

Llegamos al último paso. Cuando hayas terminado de colocar tu suelo laminado será el momento de volver a poner el rodapiés. De esta manera, se taparán por completo las juntas de dilatación y mejorará el diseño de tu tarima flotante.